Y mi papá feliz porque pudo comerse no uno entero sino dos cupcakes, desayunar al día siguiente, de postre en la comida... y hasta que se terminaron.
Quedarón muyyyy buenos, la textura es un poco extraña, como unos pancitos pero divinos. Es muy buena opción para diabéticos o simplemente para darse un buen antojito sin remordimiento de conciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario